Se convirtieron en el boom para atraer inversión extranjera y el desarrollo de infraestructura a todo nivel. Y no es para menos; con un salto cuantitativo que ha sido exponencial en las últimas décadas, Panamá tiene sorprendido al mundo entero.

Supieron estimular la economía y el comercio internacional, haciendo que las cosas sucedan, planificando, pensando a largo plazo. Con un crecimiento acelerado en estos años, que llegó a su mayor punto en 2011 con 10,6% y manteniéndose elevado hasta 2014, donde tuvo un crecimiento estimado de 7,3%, su desarrollo vino impulsado por varios factores, donde el más importante fue la construcción, especialmente al ampliar el Canal de Panamá. Esto, además de abrir más vías de comunicación, trajo consigo nueva tecnología, personal más capacitado y aumento del turismo.

Para los especialistas consultados, sin duda alguna su infraestructura portuaria ha sido un factor esencial para el desarrollo de toda una plataforma logística; y su obra más estratégica, el Canal, ha sido un imán para atraer inversión y ni qué decir empleo. Desde su inauguración, el 15 de agosto de 1914, el canal ha sido clave para mantener a Panamá como uno de los focos más importantes de Latinoamérica, y por eso se han realizado varias ampliaciones. La más reciente aún está en curso y a poco de terminar.

“La colocación del concreto, que es una actividad de 4,4 millones de metros cúbicos, ya pasó la ruta crítica. Las dieciséis compuertas se terminaron en mayo. Y con respecto a las válvulas, que son 152, se han instalado más de ochenta. Estamos en la parte de la construcción de noventa edificios que albergarán el equipo electromecánico. Toda la roca que se usaba para colocar en el Atlántico, se movía del Pacífico, porque en el Atlántico no hay buen material; pero ya la barcaza que transitaba todos los días al Atlántico, con piedras del Pacífico, terminó”, explica Ilya Marotta, vicepresidenta ejecutiva de ingeniería y administración de programas a cargo de esta obra.

Efecto en cadena

Sin duda alguna, la ampliación ha significado un impacto a nivel económico y social. Ocho mil personas están trabajando y se han generado aproximadamente treinta y cinco mil empleos desde que arrancó la ejecución en el 2007.

“Es una población que ha sido entrenada en un proyecto de tecnología innovadora en cuanto a construcción en Panamá”, afirma Ilya Marotta.

Gracias a esto, las universidades también se han enfocado en ofrecer carreras más especializadas, sobre todo en el área marítima, beneficiando el desarrollo de la educación.

Si bien, hoy se habla sobre un posible cuarto juego de esclusas, la ingeniera señala que “después de colocar el tercer juego de esclusas hicimos un análisis para colocar un cuarto juego, sin definir un tamaño. Si en un año o dos vemos que hay una demanda que implica una construcción de tamaño mayor, haríamos el análisis de cuál es el tamaño del barco más grande utilizado mundialmente por esta ruta para identificar el nuevo tamaño de esa esclusa, que probablemente sería un poco más grande que la que tenemos”.

Ventajas competitivas

De acuerdo con el reconocido economista panameño Rubén Lachman, gran parte del éxito socioeconómico de Panamá ha sido el sacar el máximo provecho de sus ventajas competitivas como factor determinante.

“A partir del año 2000, Panamá ha iniciado un proceso donde se aprovechan las ventajas competitivas, sobre todo a nivel económico. Para desarrollar esta plataforma de logística ha sido necesaria mucha infraestructura; y sobre todo fue vital expandir el área de la construcción, que se ha convertido en un sector estratégico que debe desarrollarse más”, aseguró.

El Dr. Lachman afirma que muchos panameños y extranjeros apuntan a la inversión en la construcción porque el país va a seguir creciendo y, aun cuando esta haya mermado, la expectativa a largo plazo, considerando la expansión del canal y el impulso del turismo, es que la construcción se aprecie, en vez de devaluarse.

El economista también habló de manera favorable sobre el crecimiento del país. “Marginalmente nunca vamos a crecer al mismo ritmo, a menos que se dé algo inesperado una vez que termine la expansión del Canal y esto traiga un repunte; pero lo normal es que vayamos a una tasa de crecimiento de acuerdo al potencial de nuestra economía, y en vez de crecer a dos dígitos, creceremos alto, pero entre 5% y 6%”, puntualizó.

Ejemplo para la región

Tanto la ingeniera Ilya Marotta, como el Dr. Rubén Lachman, coinciden en que Panamá puede ayudar al crecimiento de Centroamérica, tomado como ejemplo o como apoyo.

“Panamá ha sido exitoso no solo por el Canal, si no por todo lo que demuestra; tiene un portafolio variado que ayuda al desarrollo del país. En Panamá pueden ver cómo un país pequeño se ha desarrollado en muchas áreas. Hemos podido impulsar el turismo, países como Colombia y Costa Rica estaban más avanzados que nosotros y hemos llegado a un nivel muy amplio. Nos hemos promocionado internacionalmente en varios ámbitos, como el turístico, el bancario y el de exportación”, destacó Marotta.

“Todos los países tienen sus ventajas comparativas, pero no tienen las facilidades de comunicación a nivel internacional que tiene Panamá. Recomendaría a los países de la región que construyan muy buenas autopistas y ferrocarriles para comunicarse más rápido con Panamá y así facilitar sus exportaciones. Muchas ventajas se deben a la capacidad de exportar bienes que tienen esos países”, dijo por su parte el Dr. Lachman.

Retos que se avecinan

Para consolidar un futuro prometedor, Panamá debe enfocarse en la distribución de la riqueza.

“Vamos a seguir creciendo; una vez que se termine la ampliación, se hará un puente y vendrá la segunda línea del metro. El objetivo más importante es la distribución más equitativa de la riqueza, así como también mejorar la educación. Sería bueno que el país despertara en la limpieza, la cual debemos mejorar para seguir impulsando el turismo. Tenemos un gran potencial que depende de la actitud de las personas y de tener conciencia”, finalizó la Ing. Ilya Marotta.

“Debemos lograr integrar a todos los sectores de la economía; las partes más dinámicas deben impulsar de alguna forma a las otras. El territorio del país debe aprovecharse y que no se concentre en la región metropolitana. Además, Panamá debe enfrentar la mala distribución de las riquezas y buscar un modelo más integrador de desarrollo inclusivo y sostenible con mayor participación ciudadana que abarque a todo el territorio nacional”, concluyó el Dr. Rubén Lachman.