Estas son algunas de las diversas conductas que pueden constituir actos de hostigamiento o acoso sexual. Puede haber situaciones que no se hayan incluido en este listado, pero que sí podrían ser consideradas dentro de estos términos.
- Piropos, burlas, chistes, sonidos, o comentarios con contenido sexual no deseados, que le generan molestia e incomodidad.
- Preguntas sobre su vida privada y sexual.
- Llamadas telefónicas, mensajes de texto (incluídos en plataformas digitales como WhatsApp o Messenger) y correos electrónicos, de carácter ofensivo con contenido sexual.
- Imágenes de contenido sexual que le son ofensivas y desagradables.
- Amenazas por no aceptar propuestas de tipo sexual.
- Recibir represalias, tales como abusos de poder y críticas sin justificación hacia sus labores, como producto de no aceptar proposiciones de carácter sexual.
- Miradas insinuantes, gestos morbosos y/o sugestivos.
- Presión para realizar actos sexuales a cambio de beneficios o bajo amenazas.
- Presión para aceptar propuestas indecorosas o invitaciones no deseadas fuera del lugar de trabajo u universidad.
- Roces físicos o acercamientos corporales no deseados.