Ahora la producción agrícola orgánica de la provincia de Cartago puede aprovechar el impulso del uso de microalgas para mejorar la calidad de los suelos, y con esto cosechar hortalizas más sabrosas y nutritivas.
Esta innovación consiste en la aplicación de bioestimulantes, a base de microalgas, para mejorar el crecimiento y rendimiento de las hortalizas. Se pone a disposición de las personas agricultoras gracias al Tecnológico de Costa Rica (TEC) [2], por medio de la Escuela de Biología [3] y del Centro de Investigación en Biotecnología (CIB) [4].
De acuerdo con Fabián Villalta Romero, extensionistas de la Escuela de Biología, con el uso de microalgas se pueden mejorar las condiciones del suelo para el establecimiento de un equilibrio microbiológico.
“Esto permite que se puedan establecer hongos, bacterias y levaduras benéficos, formando comunidades microbianas que ayudan a la planta a mejorar sus capacidades productivas y reducir la presencia de algunos patógenos”, expresó Villalta Romero.
Esta innovación tecnológica llega a la agricultura orgánica de Cartago gracias a los proyectos de extensión que se desarrollan con los fondos de la Ley del Cemento que maneja el Tecnológico de Costa Rica, en beneficio de la producción del sector agro en la provincia.
Además, pone a disposición de Costa Rica el conocimiento de los beneficios de las microalgas, acumulado durante cerca de dos décadas de trabajo de estudiantes y personas investigadoras.