Docente de Producción Industrial

Nuevo representante académico de Inteco quiere impulsar una provechosa alianza con las universidades

6 de Septiembre 2017 Por: Johan Umaña Venegas
Marco Alvarado frente a un rótulo de Inteco.

Marco Alvarado, profesor de la Escuela de Ingeniería en Producción Industrial, representa al sector académico en Inteco. Foto: Cortesía Inteco.

El ingeniero Marco Alvarado Peña, de la Escuela de Ingeniería en Producción Industrial del Tecnológico de Costa Rica (TEC), fue elegido en marzo pasado como Representante Académico en el Consejo Director del Instituto de Normas Técnicas de Costa Rica (Inteco).

Además de trabajar para que el organismo siga creciendo y aportando al desarrollo del país, Alvarado se ha puesto como misión, propiciar un mayor acercamiento con las universidades públicas, de forma que la cooperación con la academia ayude a crear mejores normas y reglamentos, y los estudiantes de las casas de enseñanza superior se vean beneficiadas.

Asimismo, ayudará a Inteco a incorporar, de una forma más efectiva, los conceptos de normalización en el estudiantado, así como sus beneficios e implicaciones en la calidad de vida de los ciudadanos.

“Lo que se pretende es justamente trabajar como un puente. Es decir, si hay iniciativas a nivel de las universidades, donde puedan armonizarse proyectos con Inteco, mi intervención facilitará significativamente el logro de los resultados esperados“, explica Alvarado.

Para el ingeniero hay mucho que ganar si se consigue una relación más fluida entre las carreras de ingeniería de las universidades y el Inteco. Entre las ventajas enumera:

  • Mejorar contactos para facilitar pasantías y prácticas profesionales.
  • Aumentar el número de becas para capacitaciones de normalización.
  • Vincular proyectos de investigación y extensión con las comisiones de Inteco encargadas de la creación de normas.
  • Acceder de forma inmediata a información sobre las tendencias en temas de normalización y evaluación de la conformidad.

“Mucho de lo que nos ilusiona es ver cómo canalizamos aspectos de información, de proyectos de mejora, de proyectos de investigación; para fomentar la participación en comités técnicos, que son los que elaboran nuevas normas“, recalca Alvarado.

Incluso, Alvarado asegura que la Escuela de Ingeniería en Producción Industrial, de la que él es docente, podría aprovechar para que sus estudiantes fortifiquen sus conocimientos en metrología y otras áreas del ámbito de Inteco.

Cinco hombres y una mujer observando una presentación en una mesa de sesiones.

Alvarado en la comisión de revisión del proceso de certificación de lotes. Foto: Cortesía Inteco.

Apoyo a la pequeña y mediana empresa

Alvarado vislumbra otro punto importante en el que una alianza entre las universidades e Inteco puede ser beneficioso para el desarrollo del país, y es en el apoyo a las pequeñas y medianas empresas para adecuarse a las normas de calidad y, con ello, ganar acceso a mercados más amplios.

Es por eso que ya se estableció un primer contacto con el Centro de Vinculación del Tecnológico, para desarrollar estrategias conjuntas en este sentido.

“Beneficia a Inteco en que si se ocupan pasantes, ojalá para medianas y pequeñas empresas que tienen recursos limitados, podemos ver cómo ayudarlos en estructurar sistemas de calidad”, detalla Alvarado.

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